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KultO, en las cosas bien hechas, el Rizo Trust

El Novato se convierte en referencia.


Finales del 2.015, quizás algo antes, calle Ibiza, un domingo no cualquiera, un joven se esfuerza en los últimos detalles, el Rizo se pone en alerta culinaria. Debe ser el dueño, me pregunto, nadie que no lo sea trabajaría un domingo con tanta dedicación. Lo que durante años fuera una anodina tienda de cocinas, se había convertido en un prometedor bar-restaurante.



- Hola, ¿vais a abrir ya?.

- Hola, en unos días…

- La verdad es que el sitio os ha quedado precioso…

- Gracias, nos ha supuesto mucho “esfuerzo”. (Imaginé que la palabra esfuerzo tenía muchos significados).

- Nosotros somos de aquí. Este barrio siempre da una oportunidad, luego… luego hay que estar al nivel. Mucha suerte, vendremos a conoceros.



Todavía no sabía lo que me iba a encontrar. Desconocía que el KultO era una creación de Laura y José. Algo ya tenían ganado gracias a sus madrileños incondicionales que siempre paran en el TrasteO o en el Albedrío, de Zahara de los Atunes.


Una vez abierto, cumplí mi palabra y fui a conocerlo. Una decoración con gusto, cocina impecable a la vista, y su lema “In Cook We Trust”, bien grande. El resto, paredes con escamas azul intenso, mobiliario moderno, y mesas altas en la parte de tapeo. En el comedor de la parte de arriba, colores más sobrios, pero con el mismo encanto.


La comida del KultO o te gusta o te vuelve loco. Tiene platos teóricamente simples pero nada corrientes, como una ensaladilla rusa de manzana verde, un papelón crujiente (chicharrones), un mollete de pringá o un pepito de ternera… como me dijo una vez un camarero de allí, los platos hablan y cuando un plato está vacío…



Lógicamente, siendo de Zahara de los Atunes, el atún lo bordan, tanto el satay (con toque oriental), como el tarantelo y los tacos. Son exquisitos, incluso no te extrañe que cuando vayas tengan algún tipo de elaboración más.


También tienen evoluciones (fuera o dentro de carta) de platos más complejos como carrillera, canelón de rabo de toro, manitas o callos. No os asustéis porque son tan suaves como sabrosos. Un plato de los principales que a mí me encanta, es la fideuá de gambas y txipirones con un toque oriental (pad thai), que es capaz de hacerte llorar de felicidad. Además, si estás cerca de la cocina puedes ver el espectáculo de la elaboración en su wok.


Por supuesto, también tienen postres. Si os queda hueco pediros una Lemon Pie deliciosa o un Café Turco riquísimo. También podéis acabar con un cóctel, (trabajan bien el mezcal) o con una copa. Por la noche, una vez cierran la cocina y después de dejarla impecable, bajan una pantalla y suben un poco la música para dar ambiente.


Cumplí mi palabra y volví a ir una y otra vez. Habré llevado y recomendado a mucha gente y todos han salido encantados.

Seguid así, seguid confiando en la cocina, que nosotros lo disfrutaremos.

Agradecimientos: A todos mis amigos que me han acompañado a disfrutar del KultO, a José y Laura y a todo su equipo, por su paciencia, buen humor y profesionalidad.

Fotos propias y del KultO

KultO, Calle Ibiza, 4.

91 173 30 53

Facebook: @kultO


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