Chile y Argentina; solo con billete de ida y vuelta (Parte II)
En la primera parte de este “post” os conté mi experiencia en la zona de Atacama, el norte de Chile. Ahora nos trasladamos a la zona de los lagos y los volcanes. Para ello volamos con destino a Temuco.
Ya en el aeropuerto intentamos alquilar un 4X4 con un seguro especial que nos permita pasar a Argentina. Oh, oh…me temo que no tienen nada disponible, así que pasamos al plan B, alquilar un utilitario por dos días, para estar por la zona de Pucón y después coger el 4X4.
El pueblo de Pucón es precioso, cualquier persona se enamoraría de él nada más verlo, nuestro objetivo, ascender al volcán Villarrica, el cual todavía está activo.
Comenzamos caminando desde las faldas del volcán, junto con otra pareja de españoles y el guía. A medida que nos vamos acercando a la cima, el paisaje se va haciendo más bonito, y por fin llegamos. Juzga por ti mismo si merece la pena!!!!
La bajada ha sido divertidísima, nos hemos convertido en niños otra vez: con unos trajes plásticos, un deslizador y un piolet, y a bajarrrrrr.
Y de aventura, en aventura. Ahora un rafting por el río Trancura. Rápidos por aquí, rápidos por allá, y mucha, mucha, diversión.
Por fin tenemos el 4X4, así que lo primero que hacemos es ir a las Termas Geométricas: catorce termas al aire libre, rodeadas de árboles y vegetación, con temperaturas que van desde los 7ºC a los 40ºC. Es una sensación única, acrecentada por el hecho de que casi estamos solos. La combinación de la madera, el agua y la formas especiales de las termas, le confieren un atractivo único, difícil de explicar.
Nuestro viaje sigue cruzando el lago, pasando por carreteras de ripio y por fin llegamos a Huilo Huilo, una reserva biológica, donde se encuentra nuestro hotel.
"Como salido de un reino desconocido, en medio del bosque, un árbol extiende sus ramas hacia el cielo y emerge Nothofagus, maravilloso edificio hecho de materiales nobles donde se experimentan sensaciones, formas, texturas y sonidos".
¿Y qué podemos hacer aquí? Canopy XL, una tirolina gigante con una extensión de más de 1km y desniveles de hasta 90m; pasear por sus bosques y sumergirnos en unos toneles gigantes de agua al aire libre.
Como veis los días van pasando y nosotros no paramos. Ahora en el transbordador que nos lleva a Argentina.
Al cruzar la frontera hemos hecho una pequeña parada en San Martín de los Andes, para seguir hasta San Carlos de Bariloche, donde llegamos por la noche, después de un trayecto lleno de maravillosos paisajes por la larguísima N40.
Si vas allí, no puedes dejar de hacer un circuito que te permita ver los distintos lagos y culminar la excursión con una subida en telesilla al “Cerro Campanario”, desde donde podrás verlos todos.
Cruzamos de nuevo a Chile, con el objetivo de llegar a Puerto Varas y es cuando estamos llegando que divisamos a lo lejos el volcán Osorno, imponente, dejando ver toda su belleza entre las nubes.
Venga, venga, que ahora nos vamos rumbo a Pargua, para desde allí coger un transbordador que nos lleva a la isla de Chiloé. Ya en Chiloé, conducimos hasta Castro, un pueblo pesquero bastante conocido por sus palafitos, viviendas apoyadas en simples estacas o palos.
Cogemos de nuevo el transbordador y nos vamos a otra isla llamada Quinchao, donde nos recorremos sus pueblecitos, típicos por sus iglesias de madera y casas revestidas con tejuelas.
Transbordador aquí, transbordador allá, y nos paramos en Ancud, cerca de Chacao donde cogemos otro para ir a Puerto Montt, concretamente al aeropuerto, desde donde sale nuestro vuelo con destino a Punta Arenas.
Ya aquí, conducimos durante dos horas para llegar a Puerto Natales, donde se encuentra el Parque Nacional Torres del Paine, pero para saber qué va a pasar, tendrás que esperar a la siguiente entrega. Te aseguro que no te dejará indiferente...
Fotos: SigueElRizo